Gobierno Electrónico y su impacto en la Ciudadanía

Sergio Jeréz Rico (Ayuntamiento de Barcelona), Susana Finquelievich (CONICET / Links), Miguel Porrúa (OEA), Pablo Clusellas (GCBA).
Modera: Eduardo Martelli (GCBA).

Sergio Jeréz Rico:
Comentó las experiencias de la administración digital en la Ciudad de Barcelona. Para ello inició su exposición expresando que en materia de e-goverment el Ayuntamiento decidió adoptar una estrategia centrada en tres ejes: personalización de los servicios, ubicuidad de los canales y análisis racional de los procesos verticales y horizontales. A partir de esta introducción enumeró las diferentes experiencias, comenzando por el caso de Bienvenido a Barcelona. Destacó cómo los nuevos canales de interacción con el ciudadano han facilitado los trámites y servicios online que permiten eliminar gran porcentaje de los intermediarios (que suelen ser empresas) entre gobierno y ciudadanos. Estos canales agrupan varios trámites, servicios en uno y se ajustan a las demandas particulares de cada ciudadano.
Otro caso interconectado con el anterior es el de Facturas Telemáticas, en donde el Ayuntamiento de Barcelona con la intención de mejorar los servicios y las demandas de sus ciudadanos, logró la interacción de los diferentes actores intervinientes en el proceso, generando nuevos procesos de pago que no solo mejoran un servicio, sino que también permiten lograr un ahorro de tiempo y recursos.
Otro aspecto importante de la administración digital consiste en generar trabajo dentro de la comunidad, por ejemplo en el desarrollo de aplicaciones para telefonía móvil de interacción con el gobierno, lo que podría generar trabajo para desarrolladores locales. Como por ejemplo: si una empresa que ofrece servicios de restauración tiene acceso a ver cuáles son los edificios de Barcelona que tienen más de cien años, podría ofrecer sus servicios en esos lugares.

Miguel Porrúa:
El conferencista español disertó sobre la nueva burocracia y su impacto en la ciudadanía, el sector público y el e-Gobierno.
Señaló que en Argentina y, en general en América Latina, – salvo en algunos municipios específicos- no hay suficiente desarrollo en materia de gobiernos abiertos. Ello se debe a que falta personal calificado y recursos financieros y también porque suelen producirse desvíos de fondos (por corrupción), lo cual redunda en proyectos de gobiernos abiertos que fracasan.
Expresó que los municipios que han logrado alcanzar cambios de vanguardia se debió a tres condiciones necesarias: el compromiso y liderazgo político, los recursos humanos calificados y la disponibilidad de recursos financieros.
Comentó el caso del municipio Patzún, de Guatemala (www.patzun.gob.gt) donde el alcalde, un hombre de servicio y transparente, logró colocar a su ciudad a la vanguardia en el programa tecnologías de información y comunicación (TIC).
Concluyó su exposición detallando que para alcanzar un verdadero cambio las autoridades locales deben:
– adoptar un liderazgo político que permita armar un equipo humano calificado y una estrategia de avance.
– trasmitir una voz común de cambio al gobierno nacional que transforme la necesidad de avanzar hacia un e-gobierno en un esfuerzo nacional
– y estar dispuestos a la búsqueda de financiamiento.

Pablo Clusellas:
El Secretario Legal y Técnico de la Ciudad de BUenos Aires señaló que administración pública tiene dos activos: información y capital humano.
“En primer lugar hay que plantearse si hay voluntad política de hacer administración electrónica. La tendencia indica que sí, pero muchos no tienen herramientas para hacerlo. Y en otros casos es la corrupción la que impide cambiar a ese sistema”, señaló. Y explicó que:
-Con la administración electrónica cambian las relaciones de poder. El gobierno pierde poder, al ser un sistema más amplio y participativo.
-El cambio de sistema impone capacitación. Se trata de pasar de la capacidad de una administración burocrática a una administración electrónica.
-Hay que encontrar la solución tecnológica adecuada para la administración pública electrónica.
-Se debe crear una normativa que le dé legalidad al proceso de cambio. Hay que evaluar normas con criterio moderno.
Para el funcionario, una vez puesto en marcha este sistema de gobierno, la eficacia y la legalidad, que para algunos parecen antagónicos, se convierten en socios.

Susana Finquelievich:
La investigadora del Conicet fue convocada por el Gobierno de la Ciudad para evaluar, entre otros, aspectos de la administración electrónica como la facilitación de trámites, que requiere una coordinación interna.
Señala que para la participación mediante tecnologías de información y comunicación (TIC) en áreas de política, partidos, reclamos y propuestas políticas -ya sea para organizaciones establecidas o espontáneas- se requiere voluntad política.
También indica que la apertura a nuevos sectores representa cierto riesgo para el poder y aconseja una convocatoria a múltiples sectores para participar en la propuesta de una agenda digital (que incluya temas de ciencia, género, seguridad, cultura, entre otros).
“El gobierno electrónico puede abrir espacios y alentar participaciones”, aseguró.